Nick Lugli:' ¡¡¡Espero que nos abandone el atomizador viejo (35 años) para comprar uno nuevo, pero nunca se rinde!!!"

Estamos en Módena, Bomporto, en la Azienda Agricola Gavioli Pierluigi. En esta zona, la agricultura es fundamental y se basa principalmente en el cultivo de peras y uvas.

La empresa Gavioli Pierluigi es «amiga» de Martignani desde hace casi 40 años. Fieles a nuestra tecnología, como explicó uno de sus trabajadores, Nick Lugli.

Esta empresa tiene 18 hectáreas de perales y 10 hectáreas de viñedos. Todos tratados con dos atomizadores Martignani de 35 y 20 años respectivamente. El primero es un Whirlwind B612 Turbo 1, de 1000 litros, mientras que el segundo es un atomizador Whirlwind B612 Turbo 2 con torreta.

«Tratamos a 330 litros/hectárea en peras y a una concentración de 1/5 (concentramos cinco veces). Algunos de nuestros vecinos, de nuevo con Martignani, también tratan con volúmenes más bajos, pero nosotros preferimos hacerlo así por seguridad. También porque ya supone un gran ahorro de agua y tiempo», explica Lugli. «Nuestro atomizador tiene una capacidad de 10 quintales, concentramos el producto y al final es como si hubiéramos dado 50 quintales».

En lugar de hacer 10 barricas llenas para 18 hectáreas de peras, sólo hago cinco. Es decir, la mitad».

Esta concentración, según Lugli, es una de las principales ventajas de Martignani. «Me concentro tanto que no sólo ahorro agua, sino también mano de obra y tiempo. En lugar de hacer 10 barricas llenas para 18 hectáreas de peras, sólo hago cinco. Es decir, la mitad.

Martignani, otras ventajas para los usuarios

Otra ventaja que señaló Pierluigi, empleado de la empresa Gavioli, es que «Las máquinas necesitan poco mantenimiento. Las piezas de recambio siempre están ahí y lo hacemos todo nosotros mismos. Cambiamos los alimentadores, los rodamientos, etc.». Añade irónicamente que «¡¡¡Espero que nos abandone el viejo atomizador para comprar uno nuevo, pero nunca se rinde!!!».

Por otro lado, destaca la precisión de ejecución de los atomizadores Martignani. «Si lo configuramos con la fórmula Martignani y seguimos sus instrucciones, no falla ni una coma. Añade que«la precisión de la ejecución es muy impresionante«. Además, Lugli explica que con el«volumen de aire que suministra el ventilador, la hoja queda bien cubierta en todas sus partes».

Precisión y sencillez

Los atomizadores Martignani son máquinas de tecnología avanzada y garantizan una precisión y un rendimiento muy elevados. Precisamente por esta razón, algunos en la industria podrían pensar que estas máquinas son difíciles de usar o requieren un alto nivel de conocimientos por parte de los operadores. A este respecto, el operador Nick Lugli asegura que «Las máquinas son muy sencillas. Tienen dos grifos que se abren y cierran, a izquierda y derecha. Además del manómetro, que normalmente tenemos que ajustar a 1,5 bar. Eso es todo. Es imposible equivocarse.